La Avispa asiática, una nueva especie exótica invasora a punto de llegar a Aragón.

Foto Jean Haxaire
Como identificarla.
La avispa asiática, Vespa velutina nigrithorax, es imposible de confundir con cualquiera de nuestras avispas autóctonas, tanto por su tamaño como por la coloración de su cuerpo. Se reconoce fácilmente por su tonalidad oscura, el tórax enteramente marrón negruzco aterciopelado y los segmentos abdominales marrones, diferenciados por una fina banda amarilla. Sólo posee una ancha franja amarilla en el 4º segmento. La cabeza es negra con
el frente amarillo anaranjado. Las pata son de color marrón y amarillas en los extremos. Posee una longitud de unos 3 centímetros de longitud, las reinas son de mayor tamaño, alcanzando hasta 5 centímetros.
Foto Wikipedia
Sus nidos son generalmente esféricos, aunque a veces son de forma piriforme, y de un tamaño de 20 a 50 cm. de diámetro, aunque se han localizado algunos de más de un metro. Llegan a colgarlos en árboles, pero generalmente los sitúan en estructuras y construcciones humanas abiertas, raramente en cavidades del suelo, como hacen algunas de nuestras especies autóctonas.

La estructura exterior del nido está formada por varias capas de papel, espaciadas por un vacío de aire de 5 a 10 mm aproximadamente y un grosor de unos 45 mm. Posee una única entrada, consistente en un orificio de 1,5 cm de diámetro aproximadamente y protegido por una especie de tejadillo. En el interior se encuentran las celdillas, de 8,5 mm de diámetro 27 mm. de altura aproximada. En el norte de Tailandia, un grupo de entomólogos que estudiaban esta especie recogieron una colonia de casi 1.500 obreras en un nido de 50 cm de diámetro, en el que había más de 6.000 celdillas.

Su ciclo biológico.
El período reproductor de V. velutina, lógicamente, no se conoce en nuestras latitudes, dado que es variable en función de la temperatura. La primavera, con la subida de las temperaturas, puede implicar un principio de puesta, pero para que se funde una colonia, es necesario que la reina tenga abundancia de alimento. Es probable que aunque las reinas aumenten su actividad a partir de febrero o marzo, las formaciones de los nidos sean más tardías. En su área de distribución original no se conocen colonias perennes, desapareciendo estas al final de su primer año de vida. En lugares con condiciones climáticas benignas, la invernada de las reinas se hace en solitario o en pequeños grupos en cavidades protegidas.
Según bibliografía consultada, una sola fundadora es la que forma la colonia, muriendo al cabo de un año y siendo sus descendientes (hembras fertilizadas) las que se convierte en entonces en fundadoras de nuevas colonias a partir del año siguiente. A lo largo de la primavera, cada fundadora construye un nuevo nido, siendo la única reina, y desarrollando la nueva colonia. Los mavchos emergen a finales del verano o principios de otoño, apareándose entonces con las hembras.

Distribución.
Vespa velutina se distribuye de manera natural por el sur de India, Tailandia, China, Laos, Vietnam, Malasia e Indonesia. El clima de estas zonas puede ser comparable al existente en el sur de Europa, por lo que es capaz de sobrevivir sin problemas en nuestras latitudes, siendo previsible que acabe aclimatándose y extendiéndose por todo el arco mediterráneo.
En Estados Unidos fue introducida antes de 1840, extendiéndose actualmente a lo largo de todo Estados Unidos y parte de Canadá. En Europa fue descubierta a finales de 2005 en el suroeste de Francia, aunque su llegada parece ser que tuvo lugar un año antes en un contenedor de madera procedente de la provincia china de Yunnan por el puerto de Burdeos. Según los últimos estudios y capturas de ejemplares Vespa velutina parece estar ampliamente distribuida por gran parte de Francia, con una progresión espectacular, estando asentadas en 32 departamentos.
Las primeras observaciones de esta especie en España proceden de apicultores de Hondarribia, Irun y Oiartzun, en Gipuzcoa.
En Aragón no existen datos que puedan confirmar la presencia de la Avispa asiática pero, viendo la evolución de sus poblaciones en Francia y, dada la cercanía de las observaciones de Guipuzcoa, parece inevitable que no tarde en llegar y aclimatarse en nuestra región.

Daños.
En el aspecto social y económico, los daños producidos por la Avispa asiática, se centran principalmente en la apicultura. Aunque todas las avispas son predadoras, en Francia parece haber sido comprobado que el comportamiento de predación de Vespa velutina hacia las abejas domésticas y otros insectos es muy intenso, tanto en el tiempo, entre junio y diciembre, como en intensidad, a lo largo de casi todas las horas de luz diarias. Este comportamiento de la Avispa asiática frente a las abejas consiste en un vuelo estacionario en los alrededores de la colmena, generalmente frente a la entrada, a una distancia de 30 a 40 cm, capturando a las abejas que vuelven cargadas de polen o néctar. Si consiguen entrar en la colmena, eliminan a las guardianas para posteriormente atacar a las larvas, llegando a destruir más de un 30% de la colonia de abejas. Según datos aportados por National Geographic, el ataque de un grupo de 30 avispas puede matar a 30.000 abejas en menos de tres horas. A finales del verano añaden a su alimentación frutos maduros.

Foto http://www.pbase.com/
Comportamiento de defensa de las abejas frente a la Avispa asiática.
Una especie similar a nuestra Abeja europea, Apis cerana, posee una eficaz estrategia de defensa; Ante el ataque de Vespa velutina, un gran número de abejas la rodean, haciendo aumentar la temperatura dentro de la "bola" así formada hasta los 45°C, muriendo la avispa por hipertermia. La abeja europea, A. mellifera, en Asia ha adoptado la misma estrategia defensiva aunque, al parecer, con menor éxito ya que participan un menor número de abejas. Ello podría deberse a una adaptación más reciente al predador, menos de 50 años. En Francia, las pocas observaciones realizadas han revelado esta misma estrategia defensiva; ante un ataque de Avispa asiática a un colmenar, se agrupan hasta un centenar de abejas volando frente a la entrada, rodeándola hasta hacerla alejarse momentáneamente.

Riesgos para el hombre.
Al parecer se trata de una especie poco agresiva hacia el hombre, no mostrando ninguna actitud especial de agresividad, ni en vuelo, ni cerca de su nido, incluso en presencia de movimientos bruscos o fuertes ruidos. No obstante, se recomienda comportarse con esta especie con las mismas normas de prudencia que con el resto de especies de avispas.

Qué hacer si se localiza en Aragón.
Viendo la evolución de su expansión en Francia, parece inevitable que la Avispa asiática llegue antes o después a Aragón, por lo que habrá que prepararse para convivir con ella. Dado que parece imposible frenar su expansión, la única opción posible será controlar su población. La Agrupación de Defensa Sanitaria (ADS) Apícola nº1 de Huesca ha dado la voz de alarma entre sus asociados, haciendo un llamamiento, tanto a ellos como a excursionistas, montañeros y otros colectivos que realizan actividades en la naturaleza, para que informen a los guardas forestales o Agentes de Protección de la Naturaleza del Gobierno de Aragón con el fin de controlar la invasión de esta especie y frenar su expansión en la provincia de Huesca.

Más información sobre la Avispa asiática Vespa velutina:
Inventario Nacional de Patrimonio Natural (Amplia información en Francés)

3 comentarios:

  1. Estamos apañaos.... estupendo artículo...salu2 Damián..

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  2. Pasan los años y la plaga no deja de avanzar. Tendremos que acostumbrarnos a convivir con ellas.

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  3. Han pasado los años y la plaga no remite. ¡Es imparable!

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